Origen Humilde, Corazón Trabajador:
Carolina Viggiano, es madre y esposa, nació en San Juan Ahuehueco, Tepehuacán de Guerrero, Hidalgo, un pequeño pueblo en la región de la Sierra, es hija de comerciantes y pequeños agricultores. Desde temprana edad, Carolina aprendió la importancia del esfuerzo y la perseverancia, valores que han marcado cada paso de su notable trayectoria. Considera a la familia como el pilar más importante de la sociedad, defiende la vida, la justicia y la libertad.
De San Juan a la Capital:
Con grandes sueños y determinación inquebrantable, a sus 11 años Carolina se trasladó a la capital del estado para continuar su educación, en virtud de que en su pueblo no había educación secundaria. Con sacrificio y dedicación, se graduó como Licenciada en Derecho, es maestra en Gobernanza y Comunicación Política y se encuentra cursando un doctorado en Administración Pública.
Un compromiso con la Comunidad
Su primer empleo fue Defensora de Oficio para defender a los más pobres; como la primera mujer en ser Secretaria de Desarrollo Social trabajó por los indígenas, por llevar agua, luz, escuelas, casas de día para adultos mayores, abrió carreteras y construyó puentes. Carolina ha demostrado un profundo compromiso con su gente luchando por mejorar las condiciones de vida de las comunidades marginadas.
Fue la primera mujer en ser Presidenta del Tribunal Superior de Justicia de Hidalgo y realizó grandes transformaciones. También fue la primera mujer en ser directora del Conafe.
Una voz desde el Congreso para beneficiar a las y los hidalguenses:
Carolina ha defendido a su estado como legisladora local y federal, siempre cumpliendo y rindiendo cuentas a los electores, trayendo recursos extraordinarios.
Es autora de la Ley General para Prevenir la violencia y la delincuencia en México, logrando colocar un fondo para la prevención del delito en el presupuesto. Ha realizado muchas reformas en beneficio de las mujeres, la niñez, los adultos mayores, los derechos laborales y otras importantes acciones legislativas.
